El concepto DORI es un estándar clave en el campo de la videovigilancia, ya que define la capacidad de una cámara para proporcionar distintos niveles de detalle en función de la distancia. Las siglas DORI provienen de cuatro palabras en inglés: Detect, Observe, Recognize y Identify, que se traducen como detectar, observar, reconocer e identificar.
- Detectar: Este nivel permite distinguir la presencia de una persona u objeto en una escena, aunque sin detalles específicos. Por ejemplo, una cámara que ofrece esta capacidad es útil para alertar sobre movimientos en áreas amplias.
- Observar: En este nivel, se pueden discernir ciertas características generales de una persona u objeto. Si bien no se llega a un reconocimiento detallado, es posible obtener información sobre el comportamiento y acciones.
- Reconocer: Aquí, las cámaras permiten identificar a una persona conocida o reconocer un objeto concreto, lo cual es esencial para monitorear accesos o vigilar áreas de alta seguridad.
- Identificar: Este es el nivel más detallado. Las cámaras que cumplen con este estándar son capaces de mostrar detalles faciales o elementos distintivos de una persona u objeto, permitiendo su identificación sin margen de duda.
El concepto DORI se utiliza como una guía para seleccionar cámaras de videovigilancia adecuadas según las necesidades de cada espacio. Por ejemplo, una cámara que necesita monitorear una entrada principal con capacidad de identificar rostros deberá tener un alcance de identificación más detallado, mientras que una que cubra un estacionamiento grande puede estar optimizada para detección u observación.
Entender el estándar DORI ayuda a tomar decisiones informadas y a equilibrar costos con funcionalidades, garantizando así un sistema de videovigilancia efectivo y adaptado a cada situación.
